Si me dieran a describir el «photoshoot» de mis sueños, no quedaría para nada muy alejado de éste que hoy os traigo.
El paseo post-boda de Sergy y Jessica, no fue más sino que idílico. Siempre me he imaginado una sesión de fotos así, con una pareja súper enamorada, un entorno natural puro, el momento del día adecuado, la luz perfecta; y, por si fuera poco, la familia y amigos para apoyar y participar en las fotos.
Prácticamente tenían preparado un campamento para la ocasión, ya que Jessica y sus amigas tenían previsto un cambio de vestuario y estilismo que precisaba de un improvisado vestidor; aparte de mesas, merienda, música, globos, ¡así da gusto!
Gracias chicos, Sergy y Jessica, por permitirme de nuevo documentar momentos tan auténticos de vuestra historia, así como a todos los que participaron. ¡Lo pasamos de maravilla!
Si os ha gustado esta sesión, ¡más os gustará su reportaje de boda!













